El cáncer de cérvix, uno de los más incapacitantes, se produce por la aparición y crecimiento de células tumorales en el cuello del útero, debido sobre todo a la infección por el virus del papiloma humano (VPH), habitualmente de transmisión sexual. Es el cuarto tumor maligno más frecuente en  mujeres y el predominante en 28 países en vías de desarrollo, donde, además, es la primera causa de mortalidad por cáncer entre las mujeres, por delante incluso del de mama. Su incidencia en España es de 6,3 casos por 100 000 mujeres al año. 

Su detección precoz es posible mediante el estudio de una citología cervicovaginal. Sin embargo, en España no existe un programa poblacional de diagnóstico precoz en el que se estudie a toda la población femenina, por el alto volumen de muestras a analizar. De tenerse, permitiría iniciar el tratamiento mucho antes reduciendo las secuelas y la mortalidad de este cáncer.  

El proyecto ‘Inteligencia artificial para el diagnóstico precoz del cáncer de cérvix’ pretende desarrollar un Sistema de Ayuda al Diagnóstico Médico para localizar células con cambios patológicos. La ventaja principal es que se podría manejar un gran volumen de citologías de forma automática, identificando las muestras patológicas, lo que supondría una reducción de cerca del 85% de la carga de trabajo frente a la revisión clásica de estas muestras. Sería una herramienta útil para plantear estrategias de cribado poblacional, permitiendo disminuir la incidencia de este cáncer y su detección en formas iniciales con menores secuelas para las pacientes. 

El equipo de investigadores está liderado por Andrés Bueno Crespo, docente e investigador del Grado en Ingeniería Informática de la UCAM, y José Martínez Más, ginecólogo y director del Centro Integral de Atención en Ginecología y Obstetricia en Torre Pacheco (Murcia). Andrés Bueno destaca la importante cantidad de tiempo que se gana con este sistema: “Será de gran utilidad para el patólogo, porque el algoritmo le permitirá fijarse en las citologías más problemáticas y, al marcarle la región de interés, puede ir directamente a la zona donde hay una posible célula tumoral. En el tiempo en el que un patólogo estudia una citología, la inteligencia artificial analiza cientos de ellas”. 

José Martínez Más resalta la importancia de la detección precoz que permitiría el desarrollo de esta aplicación: “Si somos capaces de detectar las lesiones iniciales, podemos hacer un tratamiento mínimamente invasivo y sin secuelas para la paciente. Si no se detecta a tiempo, la lesión evolucionará y desarrollará un cáncer que puede costarle la vida, o bien ser tratada mediante cirugías radicales con pérdida de capacidad para ser madre o con secuelas graves en cuanto a efectos secundarios de radioterapias locales”. Este cáncer “se ve cada vez más en mujeres jóvenes, ya que si bien la edad media es de 48 años, está aumentando la franja de detección entre los 30 y 35”.

¿Cómo participar? 

La investigación ya ha comenzado y se puede colaborar en precipita.es, plataforma de participación ciudadana para la ciencia, puesta en marcha por la Fundación Española para la Ciencia y Tecnología, dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación. Las aportaciones inferiores a 150 euros tienen una desgravación del 80% que se refleja automáticamente en la declaración de la renta del año posterior. 

Entra en la página web  https://www.precipita.es/proyectos/INTELIGENCIA-ARTIFICIAL-PARA-LA-DETECCION-PRECOZ-DEL-CANCER-DE-CERVIX y sigue los pasos que indica para sumarte a este proyecto.