¿Te has planteado cuáles son las implicaciones éticas derivadas de los avances en tecnología actuales? La Inteligencia Artificial hoy está en boca de todos. Las nuevas líneas de desarrollo tecnológico traen avances que supondrán a corto plazo la llamada cuarta revolución industrial.

Las formas de trabajo van a cambiar. El sentido mismo del trabajo tiende a transformarse pero, ¿realmente nos cuestionamos cuáles serán las consecuencias de este proceso?

Este tema nos dio mucho que pensar a toda la comunidad de la UCAM en el Solemne Acto de Apertura del Curso Académico 2023-2024 de la UCAM. El economista, profesor de la Universidad de Bolonia y profesor adjunto de la Universidad Johns Hopkins (SAIS Europa), el Dr. D. Stefano Zamagni, presentó su Lección Inaugural 'El capitalismo cibernético y el proyecto transhumanista. Cómo remediar la crisis actual del pensamiento', desde una perspectiva filosófica que cuestiona la ética de estos avances.

Acto de Oficial de Apertura del Curso Académico 2023/24 de la Universidad Católica de Murcia

Su discurso, centrado en la crisis actual del pensamiento, plantea preguntas interesantes conectadas directamente con la realidad social y económica. En este artículo os traemos algunas de las conclusiones que comentaba el profesor y que han hecho mella en nuestra comunidad universitaria.

Como explicaba el doctor Zamagni, el transhumanismo sostiene como hipótesis fundamental que, para el año 2050, los seres humanos estaremos obsoletos. Las funciones que durante milenios se han atribuido al ser humano pasarán a ser desarrolladas por las máquinas.

Además, también recalcó la diferencia entre la robotización que se venía dando hasta ahora y la que se inicia con la inteligencia artificial:

“Con la automatización, los robots sustituyeron los brazos de los trabajadores; la inteligencia artificial tiende a sustituir sus mentes”. 

Nos encontramos así con unos ‘robots’ que no solo asumen un rol ejecutor aliviando las cargas de trabajo pesado en la industria, sino que también se convierten en las conciencias detrás de las ideas, de las decisiones y, en definitiva, de la evolución social y económica.

“Con la automatización, los robots sustituyeron los brazos de los trabajadores; la inteligencia artificial tiende a sustituir sus mentes”. 

A priori, parecería que el transhumanismo es una corriente más de pensamiento que puede o no evolucionar con el tiempo. Sin embargo, si nos limitamos al terreno fáctico, en este momento muchos de esos cambios ya se están produciendo. De hecho, en Estados Unidos ya se han podido ver las primeras tentativas de experimentación mediante células madre. De ellas, se extraían neuronas que procesaban y reinsertaban en microchips en la corteza cerebral de personas voluntarias. El resultado fue todo un éxito, pero las autoridades estadounidenses lo frenaron por ir más allá de lo permitido. Hablamos de una corriente centrada en los avances técnicos, no así en las implicaciones éticas y humanas de dichos avances.

Stefano Zamagni atiende a los medios de comunicación

El transhumanismo, basado en la corriente del utilitarismo, defiende la evolución en base a su utilidad. Según esta línea de pensamiento, si algo es útil, merece la pena desarrollarlo, aunque sus consecuencias a largo plazo puedan ser perjudiciales para el ser humano. No distingue entre el bien y el mal.

Ese pensamiento se agrava, en primer lugar, por el Singularismo, que, en palabras de Zamagni:

“El Singularismo va un paso más allá del individualismo, que hace a los jóvenes vivir como si su comunidad no existiera, estando en contacto con ella pero sin relación. Lo que también ocurre en la vida política”.

Por otro lado, también entra en juego la crisis del pensamiento católico. El profesor expuso la necesidad de actualizar la Doctrina Social de la Iglesia para que se mantenga vigente en estos nuevos tiempos.

Neohumanismo: el valor de la existencia y su armonía

Ante tal situación, el profesor Zamagni nos instaba a la acción. El transhumanismo se basa en la idea de que no existe una verdad a priori o una verdad objetiva. Haciendo uso del concepto fake-true, evidenciaba el peligro de asumir mentiras como verdades por la ausencia de una corriente contraria que rebata las afirmaciones transhumanistas.

La Lección Inaugural se impartió en el Templo del Monasterio de Los Jerónimos

Él planteaba la necesidad de que las universidades católicas como la UCAM trabajen para actualizar e impulsar nuevas líneas de pensamiento adaptadas a los tiempos. Líneas de pensamiento ligadas a la corriente Neohumanista, que plantea progreso dentro de la ética, del valor del ser humano y del amor a Dios.

De esta manera, cerraba su intervención, haciendo reflexionar a la comunidad de docentes y personal de servicios de la UCAM, así como a las diversas autoridades que asistieron al acto.

Y ahora planteamos nosotros, ¿podemos realmente hablar de progreso humano si dejamos a un lado ese valor del ser, la conexión que nos une a los demás y la búsqueda del bien común?