Un experto de la UCAM alerta del incremento de los factores psicosociales que provocan la depresión
Con motivo del Día Mundial de lucha contra esta enfermedad, César Toledo, psiquiatra y docente en la Facultad de Medicina, incide en que componentes como el acoso escolar o laboral, la desestructuración familiar o las carencias afectivas, están generando un aumento de esta patología, más allá de aspectos genéticos o neurofisiológicos
Según la Organización Mundial de la Salud la depresión, una patología que afecta a 2,5 millones de personas en España y a 300 millones en todo el mundo, “en 2030 será la principal causa de discapacidad”. Una tendencia asociada a los cambios que está experimentando la sociedad, “a día de hoy las dificultades, aun siendo menores que hace unas décadas, nos provocan más ansiedad. Hay más estrés, más exigencias, objetivos cada vez más difíciles de alcanzar” comenta el psiquiatra y profesor de la UCAM, César Toledo que, con motivo del Día Mundial de Lucha contra la Depresión, asegura que “actualmente una persona no se contenta con un trabajo y una familia, hay que ser y tener cada vez más. Todos los mensajes van en esa línea y esto afecta sobre todo a las poblaciones más jóvenes”.
Hay diferentes tipos de depresión; la mayor, la bipolar, la distimia o los síntomas secundarios asociados a los trastornos de personalidad, entre otros. Es importante saber de cuál de ellos se trata, para establecer un diagnóstico y tratamiento y en este sentido el doctor Toledo recuerda que la señal de alarma se activa con la denominada ‘ruptura biográfica’, “que es cuando se produce un ‘antes y un después’ en la rutina o actitud de una persona, que se da cuenta de que algo ha cambiado y no entiende qué lo provoca, y si detecta la situación que lo genera, comprende que, en otras circunstancias, no le habría afectado tanto”. Ese es el punto en el que hay que acudir al especialista, “siempre ha dado mucho pudor hablar de este tema, aunque cada vez es más la gente que acude al especialista solicitando ayuda. Normalmente vienen animados por familiares o amigos, es más común que el que vengan por sí mismos los pacientes porque, aunque menos, aún le dan muchas vueltas y cuesta romper ese estigma” asegura Toledo.
En este sentido, cabe destacar que es clave el papel del núcleo familiar que debe “guiar y apoyar al paciente, pero también hacer de barrera de contención”, muchas veces tienen que poner límites “y decir hasta aquí, levántate y sal a la calle”. Por eso, el doctor César Toledo lanza un mensaje a todos aquellos que estén atravesando un proceso depresivo; “que se apoyen en los suyos, que se sale. Hay muy buen pronóstico, una vez se empieza el tratamiento. La gente piensa que va a durar toda la vid, pero claro que se puede dejar atrás. Hay luz al final del túnel”, concluye.